Por: Natalia Ortiz Morales (*)
Con la reciente asunción de Manuel Merino a la presidencia, miles de personas se manifestaron en contra de la vancancia de Martín Vizcarra en plena pandemia. A raíz de este suceso, el último martes, la moneda local y la bolsa de valores del país se derrumbaron a los niveles más bajos desde el 2002 (sol 1,3% y bolsa 3,42%). Asimismo, se proyectó una caída del 12,5% en la economía del país este 2020.
Los problemas económicos que presentaron las empresas al inicio de la pandemia, se empiezan a agravar con la inestabilidad. Según la agencia Reuters, las organizaciones privadas se encuentran preocupadas, ya que el Perú tiene un mercado donde predomina la incertidumbre generada en un inicio por la crisis sanitaria y actualmente, política.
Cabe señalar que en el mes de mayo, Global Innovation Consulting (GIC) en una nota para la revista Stakeholders, recomendó que era necesario establecer en el país un modelo pensando siempre en el bien común, que beneficie a la población y abandone todo modelo económico existente antes de la crisis que busque beneficiar un grupo de personas.
Ante ello, GIC detectó, gracias a su método vanguardista denominado Quantum Business, que la economía debe priorizar la activación del mercado interno con la producción y el consumo de producto nacional. Con esta medida, se podrá impulsar los diferentes sectores económicos del país.
