Proyecciones en las tendencias del dólar para el 2025

Se espera que el tipo de cambio del dólar en Perú mantenga una tendencia estable o ligeramente a la baja durante los primeros meses de 2025.

Según explica Matías Maciel, CFO y Cofundador de Rextie, la casa de cambio online líder del Perú, venimos de un periodo reciente donde el tipo de cambio del dólar estadounidense en el país ha mantenido una notable estabilidad con leves fluctuaciones que han tendido a la baja.

La última semana, por ejemplo, comenzó cerca de los S/3,80 y cerró apenas por debajo de los S/3,79. Este comportamiento es consistente con lo observado a lo largo del año, destacándose una cotización final de 2023 en S/3,807. Estas cifras evidencian la fortaleza macroeconómica del país, sustentada por un superávit comercial creciente, reservas internacionales sólidas y una política fiscal responsable. Estos factores consolidan al sol como una de las monedas más estables de la región.

Factores locales

En el ámbito doméstico, la oferta sostenida de dólares ha sido determinante. La balanza comercial ha alcanzado niveles récord cercanos a los $20,000 millones, mientras que las reservas internacionales del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP) superan los $75,000 millones. A esto se suma el incremento de las remesas internacionales, que se expanden a tasas cercanas a dos dígitos. Este contexto garantiza una oferta robusta de dólares en la economía local, consolidando la percepción de estabilidad del tipo de cambio y una tendencia hacia la baja para los próximos meses.

Adicionalmente, Maciel, menciona que la recuperación industrial del país continúa con señales positivas con un crecimiento interanual de +2.7 % en septiembre, marcando la tercera expansión consecutiva en este sector. Por su parte, el BCRP ha mantenido una política prudente, situando la tasa de interés en 5.0 % desde este mes, lo cual ha contribuido a un entorno económico favorable para las empresas y las familias.

No obstante, de acuerdo con el especialista, es importante no perder de vista el panorama político, especialmente con la proximidad de las elecciones y la multiplicidad de candidatos que generan incertidumbre sobre el futuro.

Factores internacionales

En el escenario global, el dólar estadounidense enfrenta múltiples presiones. Por un lado, la Reserva Federal de los Estados Unidos decidió reducir los tipos de interés en 25 puntos básicos, aunque el mensaje de su presidente sugiere que estas disminuciones podrían no extenderse en 2025. Este posicionamiento, sumado a la reciente revisión al alza del PBI estadounidense y un índice de precios de gastos de consumo personal en descenso, refuerza la percepción de una economía sólida y una inflación controlada, lo que podría fortalecer al dólar en los próximos meses.

Por otro lado, las tensiones geopolíticas son un factor de peso. El conflicto bélico en Europa, que involucra a Rusia, Ucrania y otros actores internacionales, sigue generando incertidumbre. De igual manera, el conflicto en Medio Oriente y las tensiones entre China y Occidente representan riesgos significativos para los mercados financieros. Estos eventos, aunque lejanos, tienen un impacto directo en las perspectivas sobre la fortaleza del dólar y, por ende, en el precio del dólar en Perú.

Proyecciones para 2025

Con base en los fundamentos actuales, la expectativa es que el tipo de cambio del dólar en Perú mantenga una tendencia estable o ligeramente a la baja durante los primeros meses. Esto se sustenta en la sólida oferta de dólares en la economía local y el manejo prudente de las políticas monetarias y fiscales. Sin embargo, factores externos como las decisiones del presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, las incertidumbres geopolíticas y cualquier sorpresa en los mercados internacionales podrían alterar esta previsión.

En este contexto, el vocero destaca que “es clave para las empresas y los inversionistas seguir de cerca los desarrollos internacionales y locales, así como diversificar sus estrategias financieras para mitigar riesgos. El Perú, con su estabilidad macroeconómica y su sólida posición externa, se encuentra en una buena posición para afrontar los desafíos que el 2025 pueda presentar”.