Ante la creciente inflación, los bancos hacen esfuerzos por controlarla subiendo las tasas de interés y lo seguirán haciendo. El Banco Mundial considera que el crecimiento global se desacelere en 2.9%, en este 2022; no obstante, en junio, la entidad proyectó que en Latinoamérica todavía hay países que crecerán y se expandirán, esperando que el PIB per cápita de toda la región aumente solo un 0,6 % entre 2019 y 2023.
Los ingresos de la exportación y la situación fiscal de algunos países exportadores de materias primas se han visto beneficiados, pero se enmarcan en un entorno más ralentizado. En Perú, el aumento de la producción minera podría haber sido una garantía; sin embargo, la incertidumbre ejerce un impacto en la inversión.
Para Adriana Cuéllar, country manager de Libertex Américas Perú, la inestabilidad no es una novedad los inversionistas; sobre todo, para los grandes, quienes podrían pensar que no existe refugio seguro y sin riesgos, pues hasta los mercados de bonos han caído. No obstante, para los inversores particulares existe un margen de maniobra distinto. “Aquellos inversionistas que se desarrollan en el trading, tienen la posibilidad de tener refugios más estables al mover dinero en otros países, menos susceptibles a la desvalorización monetaria o la coyuntura política”, señala.
Cuéllar menciona que más allá del tipo de inversor, la flexibilidad, la visión a corto plazo y la gestión de los riesgos son factores claves en su toma de decisiones. “La apuesta por la diversificación en mercados es más frecuente y más en sectores aún rentables”, sostiene.
La representante de Libertex Perú explica que existen dos factores relevantes para los inversionistas: la sostenibilidad y la especulación. “Muchos grandes inversionistas están asignando responsablemente sus activos, a largo plazo, valorando el tipo de empresas y proyectos donde la sostenibilidad -basada en responsabilidad ambiental, desarrollo de la diversidad e inclusión, entre otros- es estratégica”, indica.
Agregó que la especulación sigue siendo preponderante, dado que, para los inversores particulares -e incluso en los que ya se movilizan en entornos digitales-, la especulación basada en analítica es clave.
“Como suele suceder en el trading, la incertidumbre puede no ser una mala oportunidad si se está pensando en invertir o comprar, en todo caso; considerando que las caídas en el mercado no duran para siempre y que, tarde o temprano, un mercado alcista volverá”, apunta.