Resiliencia empresarial y seguridad: Innovación tecnológica en tiempos desafiantes

Por Leopoldo Ruiz, Director Regional para Latinoamérica en Axis Communications

En tiempos de un panorama económico y político global retador, muchas empresas y organizaciones enfrentan desafíos significativos al momento de invertir en nuevas tecnologías. Sin embargo, estos momentos de dificultades también representan oportunidades únicas mejorar la eficiencia operativa y acelerar la transformación digital para optimizar proceso y reducir costos.

En la industria de la seguridad, esta realidad se hace evidente a medida que las compañías buscan soluciones escalables que les permitan abordar sus necesidades inmediatas y, al mismo tiempo, prepararse para el futuro. La clave radica en elegir tecnologías que permitan obtener una inteligencia de negocios con la que se pueda ver un retorno de inversión tangible, mejorar la productividad, operatividad y la protección de los activos empresariales.

Uno de los mayores obstáculos que enfrentan las organizaciones en tiempos adversos es la escasez de recursos y la incertidumbre financiera, lo que lleva a muchas empresas a postergar inversiones clave. Sin embargo, este mismo contexto también impulsa a las compañías a analizar detenidamente sus necesidades y optar por soluciones más integradas y eficientes. Tecnologías en seguridad inteligente y eficiencia operativa con integración de herramientas innovadoras como lo es la Inteligencia Artificial (IA) se están convirtiendo en herramientas esenciales una mejor gestión del riesgo y una mayor resiliencia operativa.

Un informe de Gartner destaca que el 70% de las organizaciones que inviertan en seguridad buscarán tecnologías con monitoreo en tiempo real, IA para la detección de amenazas y automatización de los sistemas de seguridad. Este cambio en el paradigma de seguridad demuestra cómo las empresas están adoptando un enfoque más integral, en el que la protección de datos y activos físicos se combinan para fortalecer la infraestructura digital. La prevención de ataques ya no es suficiente; ahora, la prioridad es garantizar la continuidad operativa y la capacidad de respuesta ante amenazas e incidentes.

En América Latina, la adopción de tecnologías de seguridad de última generación ha traído importantes beneficios a las empresas y gobiernos. De acuerdo con el Observatorio Latinoamericano de Ciberseguridad (OLC), países como Brasil, México y Colombia están liderando iniciativas innovadoras en el uso del Internet de las Cosas (IoT) para la seguridad, así como en la aplicación de IA para la protección de activos y personas. Las soluciones tecnológicas actuales ofrecen un alto retorno de inversión a las organizaciones, ya que permiten abordar de manera eficiente diversas necesidades operativas. Su implementación optimiza la logística, la movilidad, la seguridad y los procesos internos, además de fortalecer la comunicación con los clientes, lo que agiliza el desarrollo de tareas y aumenta la productividad. Asimismo, la escalabilidad de estas soluciones garantiza que, al integrar nuevos dispositivos o tecnologías, las empresas no requieran grandes inversiones adicionales, permitiéndoles adaptarse a los cambios del mercado y mantenerse a la vanguardia.

A medida que la tecnología, incluyendo la Inteligencia Artificial, sigue evolucionando, su impacto en las operaciones cotidianas se vuelve cada vez más evidente. Desde la protección de infraestructuras críticas hasta la seguridad pública y la gestión de emergencias, la IA está redefiniendo el concepto de protección y resiliencia. En el futuro cercano, la tecnología y la sociedad trabajarán más estrechamente para crear entornos más seguros y eficientes. La transformación digital no es una opción, sino una necesidad imperativa para garantizar la sostenibilidad y el crecimiento de las empresas en un mundo cada vez más interconectado y desafiante