Por Orlando Gutiérrez-Boronat, secretario general de la Asamblea de la Resistencia Cubana.
Tras la llegada del dictador chino Xi Jinping a Lima, para participar en la Cumbre APEC 2024, se registraron incidentes relacionados con la propaganda pública de Taiwán exhibida en la ciudad. Se reportó que grupos de ciudadanos chinos en Perú, aparentemente relacionados con las autoridades de Pekín, intentaron destruir y alterar la publicidad de Taiwán en diferentes puntos.
Los hechos ocurrieron en plena vía pública, donde se observaron carteles y anuncios que promovían a Taiwán como una entidad independiente, lo que causa tensiones por la postura de China sobre la isla, que considera, injustamente, a Taiwán como parte de su territorio.
Se denunció que varias personas se aproximaron a los carteles, los rasgaron y los arrojaron al suelo. La situación fue particularmente tensa en áreas cercanas a los centros de alto tráfico de Lima, donde la propaganda sobre Taiwán estaba visible. La proyectada electrónicamente fue apagada de manera ilegal.
El incidente resalta la capacidad del régimen comunista de intervenir en naciones libres, buscando censurar atacando la libertad de expresión y la violación.
Esta situación se da también en el marco de las controversias en torno al Puerto de Chancay, ubicado en la costa central de Perú, desarrollado por una empresa china y objeto de críticas por presuntos casos de corrupción en su proceso de construcción. Además, la inversión en este puerto ha levantado temores sobre la posible presencia militar de China en la región, debido a la creciente influencia de Pekín en proyectos estratégicos en América Latina.
Estados Unidos y otros países han expresado preocupaciones sobre el uso militar estratégico del puerto, que podría facilitar la proyección de poder de China en la región. A pesar de estos temores, el gobierno peruano ha defendido el proyecto como una oportunidad para el desarrollo económico, lo que deja abierta la controversia sobre los riesgos y beneficios de la inversión extranjera china en infraestructuras críticas.
El Frente Hemisférico por la Libertad ha condenado la actuación de los comunistas chinos en Perú. Además exige que se investigue y procese a los ejecutores de este atentado y que se respete en todo el mundo la presencia y reconocimiento de Taiwán.