SLJ se ha posicionado como una de las firmas boutique más relevantes en el ámbito de la litigación en España.
La firma especializada en litigación compleja SLJ Abogados factura 2,1 millones de euros en 2024, acelerando su crecimiento con un incremento del 30% en su cifra de negocio con respecto al ejercicio previo.
El despacho, focalizado en la resolución de disputas tanto en sede judicial como mediante arbitraje y mediación, fue fundado en 2014 por Daniel Jiménez, anteriormente socio de litigación y arbitraje en Ashurst. En el último año, el equipo ha sumado a dos nuevos socios, Álvaro Martín y Christian Castellá, fortaleciendo áreas estratégicas como el derecho penal económico y el arbitraje, respectivamente.
SLJ se ha posicionado como una de las firmas boutique más relevantes en el ámbito de la litigación en España, con una marcada proyección internacional. Entre sus asuntos más relevantes, asesora a Gotham y General Industrial Partners en la investigación iniciada por la Audiencia Nacional tras la publicación del informe sobre Grifols en enero de 2024. Asimismo, representa a los fondos internacionales tenedores de bonos afectados por la caída del Banco Popular.
Daniel Jiménez, socio fundador de SLJ, explica que “ha sido un año de crecimiento en facturación, pero también en incorporaciones valiosas a la firma, con la contratación de dos nuevos socios Alvaro Martin y Christian Castellá, que han reforzado áreas que son clave para el presente y futuro de la firma. Estamos especialmente satisfechos del crecimiento del trabajo internacional, en particular en derecho penal y arbitraje. Además, participamos en varias de las principales causas judiciales del país como el asunto Banco Popular, donde representamos a los fondos internacionales bonistas de la entidad como en la investigación en la Audiencia Nacional sobre nuestros clientes Gotham City y General Industrial Partners y el informe emitido sobre Grifols hace un año.
En este año que comienza tenemos el objetivo de consolidar esta fase crecimiento y las perspectivas son obtener un nuevo incremento significativo de la facturación anual. No descartamos incorporar nuevos socios para reforzar algún área del despacho. Pero manteniendo nuestra identidad; seguiremos siendo una boutique de litigación, arbitraje y derecho penal económico, focalizada en asuntos complejos. No nos planteamos convertirnos en un despacho multidisciplinar ni integrarnos en ningún otro despacho. Seguiremos siendo lo que somos, nos ha ido bien durante 11 años y las perspectivas para el futuro son excelentes para una firma boutique como la nuestra”.