- Gremio industrial señala que aumentar eficiencia en inversión pública y facilitar inversiones en sectores como construcción y minería ayudarán a la recuperación del empleo.
- Propone que sociedad civil y Defensoría del Pueblo hagan un seguimiento del gasto público en regiones.
El presidente de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI), Ricardo Márquez, afirmó que reconstruir la demanda interna e impulsar la inversión privada frenará la enorme pérdida de empleos que está ocurriendo en el país producto de la paralización económica. Señaló que la crisis actual exige primero no descuidar la salud de los peruanos; pero también no afectar los empleos y la actividad económica, porque estos también causan estragos sociales.
Márquez dijo que a las primeras medidas ya aplicadas en la etapa de contención es necesario incluir nuevas medidas urgentes para generar demanda interna. En ese sentido, son importantes las medidas de incremento del gasto público, como Arranca Perú, y la ejecución del presupuesto público; sobre todo, si se considera que a fines de julio, en forma preliminar, el gasto del Gobierno en sus tres niveles presentaba una ejecución de solo 19%.
“Si consideramos que casi el 80% del presupuesto de Arranca Perú depende de los gobiernos regionales, y si bien el Gobierno central ha anunciado el apoyo técnico para acelerar el cumplimiento de los presupuestos regionales, una rendición de cuentas mensuales permitiría un seguimiento de parte de la sociedad civil y de la Defensoría del Pueblo de este gasto que es fundamental en los actuales momentos”, propuso Márquez.
El titular de la SNI señaló también que la inversión privada es otro componente de la demanda que debe ser atendida, sobre todo la del sector construcción que presentó una caída del 45%. Manifestó que es precisamente la inversión privada en este sector, y en otros como el minero, los que deben tener medidas específicas de facilitación y seguimiento; pues, la ejecución de estas inversiones pueden dinamizar varios sectores de la economía.
“Es función de los gremios del sector privado, de los colegios de profesionales y las municipalidades resolver la reducción de plazos para obtener las licencias de construcción. En forma paralela, es vital reconstruir la demanda interna con la ampliación del Bono Universal por lo menos hasta fines del presente año. Esta medida es urgente desde el punto de vista social pero también imperativo para reactivar nuestro mercado interno y mover la economía nacional”, declaró Márquez.
El líder industrial precisó además que las exportaciones no tradicionales intensivas en empleo deben contar con incentivos para mantener los puestos de trabajo y captar la demanda externa, precisando que hay que dar impulso sobre todo al sector de la pesca para consumo humano directo y las confecciones que tienen capacidad ociosa, mercado internacional abierto y generación de empleos en el corto plazo.
Cifras que el Perú puede revertir
Márquez recordó que 6 millones 720 mil peruanos perdieron su empleo en el II Trimestre del año, según cifras del INEI comparada con el mismo periodo del 2019. Apuntó que estas cifras revelan la profunda depresión económica que atraviesa nuestro país, pese a que el trimestre en mención incluye las fases I y II del reinicio de actividades.
También señaló que según los datos oficiales, el empleo urbano es el más afectado, ya que se redujo de 13.2 millones a 6.7 millones, una pérdida de casi el 50% de puestos de trabajo en comparación con los que teníamos en el II trimestre del 2019. Así, el desempleo llegó al 8,8% en el mismo II Trimestre comparado, mientras que en el área urbana este porcentaje se eleva a 12.4%.
El presidente de la SNI sostuvo que las cifras del empleo en el segundo trimestre se dan en el contexto de una caída del PBI del -18.6% en junio del 2020 y un acumulado enero-junio de -17.37%, menor a de los meses de abril y mayo pero impactadas por todas las consecuencias del paro productivo y del reinicio que no fue eficiente en su administración.
La caída del PBI es explicada por una sensible reducción de la demanda interna reflejada en el menor consumo de hogares en -31-76%, caída de la inversión en construcción en -44.64% y en la propia demanda externa con un menor nivel de exportaciones tradicionales y no tradicionales de -30.54%.
Cabe mencionar que a nivel sectorial la producción del sector Manufactura disminuyó en -6,83%, según información proveniente de Produce. El subsector primario creció en 8,57% impulsado por la mayor elaboración y conservación de pescado (70,36%) y la elaboración de azúcar (10,25%); en tanto que disminuyó la elaboración y conservación de carne (-2,04%), metales preciosos (-12,62%), así como la refinación del petróleo (-60,92%). Por el contrario la manufactura no primaria se redujo en 13,40% por la menor producción de la industria de bienes de consumo (-15,05%); bienes intermedios (-6,61%) y bienes de capital (-65,83%).