- Ante un mercado en constante crecimiento, es obligatorio descubrir, analizar y potenciar nuevas tecnologías que faciliten la atención al cliente y sus experiencias.
El comercio minorista ha sido testigo de los cambios de hábito del consumidor, pero más aún de la necesidad de integrar tecnologías que faciliten sus procesos de compra y entrega, todo esto con el objetivo de seguir evolucionando y convertirse en una industria totalmente innovadora y eficaz.
En el caso de Perú, el mercado tiene aproximadamente el 30% de sus canales digitales modernos y el 70% físicos siendo los tradicionales. Si bien el comercio electrónico sigue fuerte, se espera que durante los próximos meses las tiendas físicas retomen el protagonismo con nuevas innovaciones enfocadas en la satisfacción del consumidor final.
La tienda moderna utiliza dispositivos portátiles para permitir que los asociados realicen todas sus tareas, además de los escáneres de mano para buscar un inventario, ventas adicionales y ventas cruzadas. Por otro lado, está el uso de impresoras móviles para cambios de precios. El empleado puede hacer un cambio de precio e imprimir la nueva etiqueta sin tener que abandonar el piso de la tienda.
El mercado peruano es distinto a otros países de la región: “en tecnología estamos alineados con los cambios y la transformación digital, hay algunos clientes que tienen automatización, integran tecnología en sus procesos, tenemos similitudes, pero también diferencias en temas culturales y en los procesos tanto del canal moderno y como en el tradicional. El canal tradicional ha ido creciendo y lo que ha sucedido es que se ha impulsado el e-commerce, el recojo en tienda y despacho debido a la pandemia en las tiendas por departamento y supermercados”, señala Ulrich Reiser, country manager de STG en Perú.
Perú y su adopción tecnológica
Sumarse a los nuevos desafíos y tomar las oportunidades es la clave para que el comercio minorista crezca. Y en ese sentido, Perú se caracteriza por adoptar rápidamente las tendencias tecnológicas.
“Tenemos un mercado proactivo que busca evolucionar constantemente y se adapta a las necesidades tanto de los colaboradores como de los consumidores con el objetivo de tener altos estándares de satisfacción”, explica Reiser.
“Recientemente estuvimos presentes en NRF, el evento más importante de retail en el mundo para conocer las nuevas tendencias y soluciones globales para el rubro. Actualmente, las compañías logísticas se interesan por soluciones de movilidad, etiquetado (RFID) y tiendas modernas”, comenta Reiser.
Las compañías ya se están enfocando en el futuro, explorando cada tecnología con el fin de elevar sus servicios. En ese sentido, STG indica las tres innovaciones que predominarán:
Tiendas modernas. La productividad en tiendas es clave y para ello hay que contar con soluciones que, a través de dispositivos con inteligencia artificial, entreguen toda la trazabilidad de una compañía con el objetivo de administrar inventarios, conteos, reposiciones, picking, despachos dentro de la tienda, entre otros. Esto permite al retail incluso administrar promociones y asignar tareas internas.
“Las tiendas modernas necesitan de tecnologías productivas, es así como utilizan escáneres de manos para buscar inventario, ventas adicionales y ventas cruzadas. Asimismo, está el uso de impresoras móviles para cambios de precios e impresión de etiquetas en la misma tienda con un tamaño práctico, lo que se traduce en un 70% menos de desperdicio de papel y un ahorro considerable de insumos”, asegura Reiser.
Movilidad. A diferencia de lo que se creía en pandemia, las tiendas físicas no van a desaparecer. De hecho, se están fortaleciendo y atrayendo nuevos clientes que buscan sus productos de manera rápida y moderna. Las tiendas se han focalizado en las experiencias de compra, buscando la manera de que el consumidor se sienta más apreciado. El e-commerce seguirá presente, sin embargo, los consumidores están dispuestos a movilizarse más.
RFID. Esta solución ha tenido una alta implementación en los últimos meses ya que las compañías quieren acceder a sus inventarios de manera práctica y correcta. Asimismo, permite controlar el inventario en tienda y online. De hecho, se espera que para este y el próximo año más cadenas de retail adopten RFID ya que facilitará la compra en tienda, permitiendo al consumidor tomar las prendas de su interés, dejarlas en un pos móvil y pagar rápidamente gracias al reconocimiento de productos.
Sin duda la industria será testigo de constante evolución a medida que la tecnología predomina cada sector de nuestras vidas. La clave está en escuchar al consumidor y adoptar prácticas que agilicen cada necesidad.