En tanto, el ministro de Desarrollo e Inclusión Social afirmó que indicadores de la FAO demuestran que sí tenemos un problema de seguridad alimentaria en el Perú.
Con el objetivo de compartir e implementar estrategias para erradicar la anemia y la desnutrición, autoridades nacionales, regionales y de diversos sectores se reunieron en el primer día de la III Cumbre Hambre Cero, organizada por la Asamblea Nacional de Gobiernos Regionales en la ciudad de Huaraz.
Durante la inauguración, el ministro de desarrollo e inclusión social, Julio Demartini Montes, indicó que los datos del informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura que señala que 17 millones de peruanos se encuentran en un proceso de inseguridad alimentaria deben leerse en su real dimensión. “Esta información es una referencia, pero un estudio a partir de mil encuestas telefónicas no puede ser una referencia absoluta de lo que está pasando en el Perú. Como referencia también está la información que proviene de los gobiernos regionales y locales,” afirmó Demartini Montes. Asimismo, destacó el trabajo de los gobiernos regionales de Huancavelica, Ucayali, Loreto, San Martín, Pasco y Huánuco que redujeron sus índices de anemia.
A su vez, el viceministro de políticas y supervisión del desarrollo agrario, Christian Garay Torres agregó que es necesario considerar las dimensiones de la inseguridad alimentaria y especificó que un 20% de la población vive en un estado de inseguridad alimentaria severa. “Esto significa que no tienen ingresos para cubrir una canasta básica con alimentos nutritivos, lo que impacta en su bienestar y su salud. Este 20% coincide con la tasa de pobreza nacional, que es un segmento al que se le debe dar prioridad,” agregó el funcionario quien acudió en representación del titular del sector.
Acción y estrategias desde las regiones
Como anfitrión del evento, el gobernador regional de Áncash, Koki Noriega, destacó que la III Cumbre Hambre Cero es un espacio que todos los sectores y actores puedan tomar conciencia de esta problemática que sufren casi 750 millones de personas en todo el mundo. “Tenemos que unirnos y establecer líneas de acción para que nuestras naciones se vuelvan productivas. Por eso hoy convocamos a todos los involucrados para que apliquemos la tecnología y la ciencia para producir más y que la desnutrición, la anemia y la inseguridad alimentaria disminuyan significativamente. Este es el reto en el año 2050,” puntualizó el gobernador de Áncash.
El objetivo de los dos días del evento es reflexionar sobre la desnutrición en el Perú y los progresos que han presentado las regiones en términos de reducción de las tasas de anemia infantil. Al respecto, el gobernador regional de Cusco y presidente de la Asamblea Nacional de Gobiernos Regionales, Werner Salcedo afirmó que es imperativo trabajar en el potencial de la agricultura familiar y comunitaria. “Hoy somos testigos como cada familia, comunidad campesina, cada pueblo quiere mostrar al mundo lo que realmente tiene. No solo tenemos la capacidad de producir alimento, sino que producimos alimentos de calidad. Sí podemos salir adelante, pero lo que se necesita es esta unidad donde sin distinciones, por fin un gobierno nacional trabaje de la mano con sus gobiernos nacionales y estos trabajen unidos con los municipios distritales y provinciales,” indicó.
Durante la III Cumbre Hambre Cero se presentarán ponencias a cargo de diversos gobernadores regionales, representantes del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas, especialistas del Centro Internacional de la Papa y del Colegio de Nutricionistas del Perú, entre otras entidades.